Naturalmente, cada bicicleta tiene un sillín, que incluso hace parte de ella cuando es comprada. Sin embargo, casi nunca este primer sillín resulta ser perfecto, ya que cada persona tiene un cuerpo diferente y gracias a su propia anatomía, es complicado poder acomodarse de manera que el peso del cuerpo se pueda mantener allí como si nada durante horas. La verdad es que el sillín idóneo para cada bicicleta es realmente el que mejor se pueda acomodar a las necesidades de cada ciclista.
Durante recorridos cortos, el sillín no suele generar grandes problemas. Sin embargo, y de manera lógica, a medida que el usuario de la bicicleta debe hacer recorridos mucho más largos, necesita una mayor comodidad. Existen cientos de sillines en el mercado, lo que hace pensar que elegir el más indicado puede ser una tarea bastante tediosa, pero también permite contar con un mayor número de alternativas para poder elegir.
Cómo elegir el sillín idóneo para cada bicicleta
La verdad es que el sillín idóneo para algunas personas, puede ser uno realmente incomodo para otros usuarios, pero es que esto es realmente una cuestión de gustos. En resumen, algunos modelos que muchos ciclistas, incluso profesionales, recomienden un modelo o marca determinada de sillín, cuando algunos otros ciclistas lo usan, se pueden decepcionar por completo.
Lo mejor para poder elegir el sillín idóneo para cada bicicleta, es recibir atentamente los consejos de un experto, ya que esta persona podría brindar una ayuda realmente muy importante y puede hacer que usted como comprador, pueda ahorrar una gran cantidad de dinero. Esta persona, luego de analizar el tipo de cuerpo de la persona y además, la bicicleta que usa, como la utiliza y por cuanto tiempo monta en ella diariamente.
Para ello, hay que tener en cuenta que una bicicleta de carretera, el ciclista va en una posición más inclinada hacia adelante y las salidas son largas sobre un suelo duro (el asfalto). Por su parte, quienes practican mountain bike, tienen una postura un poco más erguida, y el ocupante de de la bicicleta puede adoptar diferentes posturas casi que continuamente. Con factores como este, es que se puede pensar en el sillín idóneo para cada bicicleta.
Otro factor de gran importancia es la distancia que hay entre los isquiones de cada usuario. Los isquiones son aquellos huesos sobre los que se apoya el cuerpo al estar sentado. Dichos huesos están rodeados y son protegidos por las caderas, pero hay que tener en cuenta que mientras mś erguida esté la persona, más peso van a recibir. Por ejemplo, cuando la distancia entre esos huesos es de 135 mm, o más, es contraproducente utilizar un sillín más estrecho que esa medida.